Hacer más por los inmigrantes

Se espera que la investigación sobre la muerte de Rebeca Pierre, ciudadana de origen haitiano, y quien estaba a punto de validar su título de medicina en Chile, sea debidamente aclarada. Sus sufrimientos en el país “donde quieren al amigo cuando es forastero” y la eventual discriminación que probablemente le costaron la vida no tienen solución. Pero podrían servir para que revisemos con espíritu crítico lo que está pasando con los inmigrantes.

El año pasado y el actual, el Instituto de Chile, sede de las seis academias chilenas, se ha preocupado a fondo del tema. Hemos tenido conferencias del más alto nivel, se han realizado exposiciones y encuentros para analizar el aporte de los inmigrantes desde el nacimiento de la república. También se ha visualizado las actuales dificultades para su plena integración. La revista Anales dedicó ya un extenso volumen a los estudios que van desde el arte, la literatura, la ciencia y el periodismo a la medicina y las políticas sociales. Aunque en el imaginario popular no aparecen como inmigrantes, hay miles de destacados intelectuales, artistas, científicos, escritores y periodistas que encontraron refugio en Chile e hicieron un valioso aporte a nuestra vida. Son muchos a lo largo del tiempo. Entre ellos vale la pena recordar que hace 80 años -se cumplen pronto- el Winnipeg trajo un valioso cargamento humano cuyos frutos seguimos cosechando.

Su historia debería ayudarnos a recibir y ver con más generosidad a los haitianos, dominicanos, venezolanos y tantos otros que vienen a Chile en busca de mejores horizontes.

[CARTA PUBLICADA EN EL MERCURIO EL 22 DE MAYO DE 2019]